No hay forma de establecer a priori el remanente final de la obra de gas

El impedimento se genera en que se desconoce si finalmente el Ministerio de Planificación de la nación enviará el tramo de dinero que resta y que fuese oportunamente comprometido. Esta situación implica que se desconoce el remanente que estas obras pueden dejar para las prometidas extensiones a futuro y que supuestamente beneficiarían a los sectores de menor poder adquisitivo de la población. De todas maneras las obras avanzarán sumando los dineros del subsidio recibido y los aportes de los vecinos a costos de 2007.

Cuando se generan demasiadas expectativas es probable que luego las explicaciones no alcancen como para acotarlas. Algo de esto es lo que está ocurriendo con la tan anhelada continuidad de la red de distribución domiciliaria de gas natural de La Falda.
El anunció de que habían llegado desde el Ministerio de Planificación de la nación $2.400.000, de un total de seis millones, para la finalización de la primera mancha de la obra y como consecuencia de este subsidio, de acuerdo con lo que las autoridades municipales habían informado previamente, la posibilidad que se abría para que sectores con menor poder adquisitivo de la ciudad pudieran acceder a tan necesario servicio, hizo que las expectativas se dispararan. Pero, siempre hay un pero, no bien comenzó a debatirse el tema en el Concejo Deliberante, razonablemente la oposición pidió conocer cuál es el costo de la obras a encarar, y no hubo una respuesta satisfactoria, lo que no fue impedimento para que el oficialismo de ese cuerpo votara a favor la Ordenanza que permitía la emisión de los cedulones que tendrán que pagar los vecinos del sector afectado y que se los emitiera con los mismos costos de 2007.
Con posterioridad, el Intendente Marcos Sestopal y los Secretarios Miguel Maldonado y Jorge Pafundo, se hicieron presentes en el Concejo Deliberante, con la intención, según manifestaron, de esclarecer dudas, entre las cuales figuraba la del costo de la red domiciliaria de gas. Es cierto que arrojaron alguna luz sobre el tema, en el marco del debate que publicáramos en nuestra anterior edición. Sin embargo, el mensaje seguía sin dejar la claridad necesaria, en función de que inicialmente Pafundo dijo que el costo por frentista “casualmente” era el mismo que en 2007, más adelante se prometió generar una nueva ecuación que, en los próximos días, proveerá el costo del metro lineal de obra, y con ello se podrá acceder al costo total de la misma sabiendo de que se trata de 27.000 metros, de acuerdo con lo señalado por el mismo Secretario en esa oportunidad, lo que quedaba por dilucidar era si el subsidio cubría el costo total de la obra o si debían sumarse fondos de lo aportado por los frentistas, lo cual determinaría un porcentual de incidencia del subsidio en este tramo de la construcción de la red y por ende una disminución de los montos a transferir a las nuevas extensiones de las mismas, las que serían las cuatro zonas en las que el Poder Ejecutivo ha dividido el avance futuro de la red. En resumen, lo que comenzaba a mostrar importancia, a partir de que se de a conocer el costo de la red en construcción, es el remanente que queda para invertir en las futuras extensiones, esto siempre desde el punto de vista de aquellos que pretenden una administración clara y eficiente de esos dineros.

Con esta inquietud entrevistamos al Secretario de Coordinación General del municipio Miguel Maldonado, al que impusimos de nuestro cuestionamiento e inicio el diálogo respondiendo que “al 54 ó 56 por ciento de vecinos que estaban involucrados en lo que en su momento se determinó como Resolución 10 aprobada por el Enargas se le va a cobrar el paso de la red al mismo costo que se dispusiera en 2007. Tampoco es cierto que el Estado nacional nos vaya a girar este dinero en dos veces, nos ha girado $2.400.000 que debería haber enviado hace dos años, por eso hay que manejarse con lo que tenemos, no es cuestión, como decía mi abuelo, de andar contando los cabritos antes de tenerlos, es decir que la plata se cuenta efectivamente a partir de que esté en la cuenta, esa es la diferencia. Estamos trabajando en saber cuál va a ser la incidencia que va a tener el subsidio nacional en cada uno de los frentistas…
P: O no.
M M: O no. Pero, seguramente, por actualizaciones de materiales, mano de obra y demás, debiera tener alguna incidencia. No sabemos si es poca o mucha, si es negativa o positiva, no lo sabemos, estamos trabajando en eso y en los próximos días tendremos una idea de números. ¿Qué nos ha permitido el Estado nacional con este subsidio? Completar la obra. En primera instancia, como estaba redactado el convenio, se cambio en varias oportunidades a pedido nuestro, porque el Estado nacional nos decía les vamos a entregar seis millones de pesos para terminar con la obra dispuesta en la resolución, después como se iba a cobrar iba a haber un recupero, entonces nos dijeron devuélvanos el excedente entre lo que les costó y lo que gastaron, a nosotros nos pareció más prudente que ese excedente sea reinvertido en obra de gas, ese fue el planteo y es lo que se ha firmado en el convenio respectivo con el Ministerio de Planificación. Hasta ahí estamos, se está trabajando en la incidencia…aunque la otra cuestión es que el resto del subsidio llegue, por ahora tenemos lo que se ha girado y se va a comenzar a trabajar con ello y con lo que los vecinos vayan pagando, y no sabemos si con eso vamos a lograr concluir con la Resolución 10. Hay que ver los números, el costo de lo que falta para concluir la red y avanzar. El remanente una vez concluida la obra es en el pensamiento del gobierno extender la red a las cuatro zonas predispuestas y dejarlo lo más cercano a los vecinos que se beneficiaran con la obra a futuro.
P: Considerando que llegan los seis millones de pesos, entendiendo que este sería el costo de las obras de la Resolución 10 a criterio del Ministerio de Planificación, en definitiva tendríamos un remanente que sería el monto total de lo que pagaron todos los vecinos afectados por la red. En caso de que no sucediese así tendríamos que sumar a los dos millones cuatrocientos mil pesos recibidos el monto de lo recaudado, hacer los pagos pertinentes y recién ahí podríamos establecer qué remanente restaría para encarar ampliaciones…
M M: Sería más o menos así. En definitiva sería una cuenta que habría que hacer después, es difícil hacerla hoy por cuestiones que tienen que ver estrictamente con lo económico. Hace más de un año el Ministerio de Planificación estimó que lo que se necesitaba para terminar la obra eran seis millones de pesos, estamos hablando a más de un año después cuando las variables económicas no son las mismas, además no vino todo ese dinero porque eso nos hubiera permitido obrar de otra manera, a lo mejor ahora con la rendición pertinente nos liberan más dinero, no lo sabemos, o a lo mejor debemos esperar un tiempo…por eso es difícil cuantificar hoy cómo se va a avanzar y qué saldo nos quedaría, es posible de que podamos estimar cuál es la incidencia que tendría el subsidio en el costo de cada uno de los frentistas…
P: A ver, hoy podemos decir que es difícil arribar a un número de remanente o de resultado económico de está operatoria hasta que no se finalice la obra que comprende la Resolución 10…
M M: No es difícil arribar al costo del metro lineal que tendrá la obra, es difícil de saber el número o la cifra del remanente hasta conocer si el Estado nacional termina de girar los fondos comprometidos, lo hemos venido reclamando sistemáticamente hasta que liberaron lo que hemos recibido, bienvenido lo que ha llegado y estamos trabajando con ello, pero falta un tramo y eso genera una incógnita que no es menor…
P: En síntesis, tienen una idea clara de lo que pretenden hacer, pero no pueden trasladarlo a números finales.
M M: Es así, no depende sólo de nosotros, hay un compromiso económico, a través de un subsidio, que puede cumplirse o no, y se cuenta con el dinero que aportaran los frentistas, de estos dos componentes surgirá el número final, pero hay variables que modifican la ecuación, que es el momento y la forma en que esos dineros ingresan y los movimientos propios de la economía general, y esto modificará en más o en menos el remanente final.

Como puede observarse, hay factores que impiden el total conocimiento del resultado económico final de esta obra, lo que hace que aquellos que tienen dudas sobre la administración de estos dineros pongan reparos y los que quieren el gas, en forma inmediata, generen presión en pos de ese objetivo. Lo cierto es que la obra va a avanzar y puede que se concluya, o no, todo dependerá de los dineros que se vayan reuniendo, esperanzados en que las variables económicas generales se mantengan estables y no perjudiquen el valor del dinero con que se cuenta. Es obvio, que también habrá que esperar que el subsidio llegue en su integridad y que el Poder Ejecutivo faldense actúe tan transparentemente como dice lo hará, lo que significa proporcionar información veraz y en los tiempos adecuados, algo a lo que no está acostumbrado y le ha generado más de un disgusto en la gestión, generada por aquellos que opinan “que cuentas claras hacen a la buena administración pública ”.