Conmocionó a funcionarios las condiciones en que obreros trabajan en la Planta de Transferencia de Residuos de La Falda

Funcionarios de gobierno, integrantes del bloque opositor, visitaron la Planta de Transferencia de Residuos y se encontraron con un panorama que los conmocionó por la falta de seguridad en que se desenvuelven quienes seleccionan el material de reciclado. El responsable de esa tarea sostuvo que hace dos meses espera la firma de contrato, sin embargo en plena precariedad instaló máquinas en el predio. El Concejo Deliberante determinó la redacción de una resolución y pedido de informes.

La visita de la Concejal Ana María Nieto y la integrante del Tribunal de Cuentas Nora Piaggio a la Planta de Transferencia de Residuos de La Falda, concluyó en un informe que impactó en los concejales de la mayoría y determinó la redacción de una resolución y pedido de informes.
Las funcionarias pertenecientes al Frente de Todos y con Todos, en una de sus habituales recorridas por diferentes áreas municipales, se encontraron con operarios que desempeñaban sus tareas en condiciones inadmisibles en la planta de acopio de basura de la ciudad.
Ana María Nieto, en diálogo con Ecos de Punilla, señalo que “la idea de visitar la Planta de Transferencia de Residuos la teníamos desde hace un tiempo y el último jueves decidimos hacerlo, porque la decisión que hemos tomado es la de ejercer control sobre todo aquello que atañe a la órbita municipal, con el objetivo de que toda actividad que se desarrolle cumpla con las pautas impuestas por la legislación vigente. Es por eso que con Nora Piaggio decidimos llegarnos para conocer del tratamiento que se le da a los residuos y las condiciones en que se encuentra ese predio que se encuentra sobre un camino de recorrido habitual por parte de visitantes que se dirigen a Pampa de Olaen y de continua visita de los vecinos de la localidad por hallarse a metros del cementerio local. También con la intención de saber quienes desarrollaban tareas en el predio y en qué condiciones lo hacían, porque hay que reconocer que nos encontramos ante una tarea insalubre que requiere de resguardos en seguridad e higiene.
Una vez ahí, pudimos hablar con la persona que aparece como dueño del negocio del reciclado y compactado, un señor de apellido Fernández, el que nos dijo que trabajan en esas tareas unas 17 personas, que hacían la separación de los residuos, que esa gente en su mayoría eran habitantes de La Falda. Lo que nos llamó la atención es que esta persona dice que hace dos meses que espera la firma de convenio con el municipio, incluso nos preguntó si se encontraba a estudio del Concejo Deliberante ese contrato. Le dijimos que no y cuando le requerimos conocer los alcances nos dijo que no lo llevaba consigo”.
En relación a las condiciones en que los obreros desempeñan sus labores, manifestó que “lo que más nos impactó fue observar las pésimas condiciones en que trabajan quienes seleccionan la basura, en un lugar falto de condiciones de higiene, con la presencia de ratas, seguramente otras alimañas, perros que muestran signos de enfermedad…hay una máquina que compacta plásticos que a simple vista es en suma peligrosa ya que las manos de los operarios corren permanente riesgo y no se observa que lleven ningún tipo de protección especial. Incluso hay comentarios de que ya se habrían producido accidentes, hay que confirmar esos rumores. Los que trabajan en la plataforma, una vez que seleccionan, vierten los residuos orgánicos por un embudo que los conduce a unos tres metros más abajo, no se observa ningún tipo de seguridad que pueda impedir que alguien caiga en ese conducto, ya sea porque se resbale, tropiece, sufra un desmayo…cualquier accidente puede llevarlo a quedar enterrado en medio de un caldo insalubre que es obvio va a perjudicar su salud”.
Finalmente, sostuvo que “la basura es un negocio, genera dinero, el tema es saber en este caso para quién es negocio. Aquí aparecen una serie de convenios de trabajo, por traslados, por enterramientos sanitarios, en el caso que tratamos por reciclado, y hay cosas que no están para nada claras. Es por eso que informé al Concejo Deliberante en pleno lo que había visto y cuanto me había conmocionado, solicitando que se tomen cartas en el asunto al tiempo que generaba mi propio Proyecto de Resolución que incluye un Pedido de Informes”.


Recuadro

El Proyecto de Resolución

Textualmente el proyecto de la Concejal Ana María Nieto señala que: “En día de la fecha, efectué una recorrida acompañada por la Tribuno Nora Piaggio por la zona donde se emplaza la Planta de Transferencia de Residuos Domiciliarios, cercana a nuestro Cementerio Municipal, con motivo de poder observar el mecanismo que allí se emplea para el tratamiento y separación de los residuos sólidos provenientes de toda nuestra localidad, como así también la higiene del lugar y el estado en el que los operarios se desempeñan.
Motivó la visita, entre otros factores, los diversos comentarios efectuados por vecinos y turistas. La cercanía al Dique, camino de la Pampa de Olaen y Cementerio Municipal hacen que ese lugar esté expuesto a una observación continua.
Si bien para quien suscribe no fue una sorpresa, debo expresar que el conjunto de todo lo que allí está montado, incluidas las personas que allí desempeñan labores, empleados y contratados de nuestro municipio y personal dependiente de terceros, me sobrepasó de manera significativa, respecto a la higiene del predio y alrededores y el estado de desprotección del personal que allí trabaja.
A mi juicio, los requisitos mínimos de salubridad han sido gravemente vulnerados, por ende, la condición humana menoscabada en grado sumo dada la precariedad de todo el escenario.
Estoy persuadida que las 20 personas (aproximadamente) que allí cumplen una función no están inmunológicamente protegidas, y obviamente el calzado y la vestimenta que utilizan no es la apropiada para esos menesteres, ni siquiera utilizan barbijos, manoplas y/o guantes adecuados.
Presumo que debe haber roedores en gran número, y certifico haber visto perros en mal estado general, quizá con patologías parasitarias diversas.

Por ello: El Concejo Deliberante de la ciudad de La Falda, sanciona con fuerza de Resolución:
Art. 1º) CENSURAR la modalidad laboral a la que están sometidos hombres y mujeres que allí operan en las condiciones anteriormente detalladas.
Art. 2º) RECLAMAR se modifique la metodología de trabajo, regularizando la situación allí imperante.
Art. 3º) EXHORTAR al Municipio a que normalice
adecuadamente los convenios imperantes.
Art. 4º) SOLICITAR informe sobre el destino de los residuos una vez sistematizados y la cantidad de empresas involucradas en esta lucrativa actividad”.


Recuadro

El negocio de la basura

La Concejal opositora Ana María Nieto sostiene que la basura es un negocio, una actividad lucrativa, que en este caso no queda claro a quién beneficia. Seguramente, los beneficios son pocos y mezquinos para quienes desempeñan la labor de seleccionar, a mano, lo posible de reciclar de lo que hay que desechar y en condiciones, de acuerdo con el panorama trasladado por la edil, de absoluta inseguridad laboral y sanitaria. Condiciones que deben ser impuestas por el Estado Municipal en el convenio respectivo. No se entiende cómo, por otra parte, un señor se instala a trabajar en un predio municipal contando sólo con un supuesto acuerdo verbal. Es una situación de absoluta precariedad, donde los riesgos para el municipio son considerables, cualquier tipo de accidente que llegase a ocurrirle a alguna persona que desempeñe funciones en la Planta de Transferencia de Residuos recaerá necesariamente en la responsabilidad del municipio, por ende sobre el erario público, y esto es atentar contra los dineros de los vecinos que ya están solventando traslados y enterramientos sanitarios, con altos porcentajes diferenciados en sus cedulones, por entre trescientos y cuatrocientos mil pesos anuales, a lo que hay que agregar el costo de recolección, para tener que sumar consecuencias indeseadas y desconocidas por acuerdos entre gallos y medianoche realizados por algún funcionario. Es de destacar que se han producido dos accidentes con secuelas de gravedad en uno de los casos que se tendrán que indemnizar, considerando que revistaban en ese triste carácter de “becado” que se ha instrumentado para que trabajen en negro, sin las coberturas exigidas por ley.
Sin entrar a considerar, en estos meses de precariedad, qué tipo de canon se cobra y si ha sido percibido por el municipio, no vaya a ser, como ha ocurrido en otros casos, que las penas sean de los faldenses y las ganancias ajenas. Para que esto realmente no ocurra, es necesario que el Concejo Deliberante solicite con carácter de urgente la información necesaria y se aboque, de no haberlo realizado el Ejecutivo, a exigir al concesionario las condiciones de contratación de quienes trabajaran en la selección de los materiales a reciclar, lo que significa que tengan cubiertas las formalidades de ley en lo laboral y asistencial, y por otra parte se determinen las exigencias técnicas para la prestación del servicio y el canon a pagar por el ejercicio de la actividad, que es en sumo lucrativa, si se considera que hay más de un interesado en la explotación del reciclado. Dicho sea de paso, hay alguno que se aprovecha de la pobreza y la necesidad, pues ha pasado y se ha llevado una importante cantidad de plástico con el compromiso de volver a pagar, la suma no es menor para quien trabaja en esas condiciones, lo concreto es que el “amigo” regresó con un verso y sin nada de dinero, para luego, como señalan los partes policiales, desaparecer de los lugares donde solía frecuentar.