¿Renace CIPLA?

Nicolás Heredia me pide un informe acerca de lo acontecido el 2 de marzo en el salón Leopoldo Marechal. Allí nos encontramos los ex integrantes de CIPLA, la Comisión Intersectorial de Prevención de Lesiones Accidentales, que nació en marzo de 1994 y perduró hasta el 2002 aproximadamente, y nuevos actores convocados desde la Secretaría de Salud Municipal de La Falda.
Inicialmente hubo una meticulosa presentación de este nuevo desafío preventivo de una de las principales causas de muerte, de invalidez y de graves daños económicos y morales, en especial de niños y población adolescente o joven, por parte de la Dra. Graciela Gomeñuka y del Comisario ® Julio Martínez, asesor y coordinador en seguridad. Luego me tocó hacer una presentación de bases para un proyecto actualizado de prevención de lesiones, incluyendo en esta -denominación, todo tipo de injurias, traumatismos, intoxicaciones, mordeduras, etc., -que tienen en común el de que son evitables y prevenibles, despojándolas de la idea de la casualidad, de la fatalidad o del reconocido nombre de accidentales.
Creo que esta convocatoria nos encuentra en una situación realmente favorable respecto a 1994. Primero, porque el tema ha tomado relevancia en todos los niveles: se lo considera un Grave Problema de Salud Pública, es mucha la experiencia ganada en programas específicos de prevención de las lesiones, como de sus consecuencias inmediatas y alejadas. Ha dejado de ser un tema de grupos aislados, de vecinos dolidos por las pérdidas de sus seres queridos, para ser un problema que compromete a toda la comunidad y sobre el cual no se ha podido actuar con total eficacia, en especial por falta de decisiones estratégicas efectivas y con continuidad temporal.
En segundo lugar y relacionado con lo anterior, la convocatoria actual proviene del ejecutivo municipal. No hay que ir a pedirle que se preocupe por el tema, a motivarlo o presionarlo, es el poder político que asume esa responsabilidad y personalmente considero que ha optado por una apuesta que merece ser apoyada. Le corresponde al Poder Legislativo, asegurar con un marco legal esa continuidad de CIPLA.
En tercer lugar, han surgido leyes tanto a nivel nacional (26061) como provincial (9944) que se refieren a la Protección Integral de Niños, Niñas y Adolescentes, instrumentando los postulados de la Convención Internacional por los Derechos del Niño que está en nuestra Constitución Nacional. Nos proveen de instrumentos legales para desarrollar inter sectorialmente actividades de promoción del derecho a un ambiente saludable y seguro dentro y fuera de sus hogares. En ese sentido, la Dra. Gomeñuka recordó que La Falda está integrada a la red de Municipios y Comunas Saludables.
Asimismo, expuse la estrecha relación entre la violación de estos derechos y la siniestralidad o “accidentología”, cuando un niño sufre una lesión. En la mayoría de los casos hay una suma de negligencias tanto familiares como sociales y gubernamentales. Fallas en nuestra formación cultural que acepta riesgos dentro y fuera de los hogares y un fuerte condicionante de factores económicos y sociales: en los países más pobres y más desiguales, las lesiones son más frecuentes, más graves y más difíciles de tratar. Esa misma situación se traslada a cada región o ciudad, determinando que la lucha por la equidad social, es parte insustituible de una propuesta preventiva eficaz.
El próximo viernes 30 de marzo a las 8, 30 hs. comenzarán a trabajar las distintas subcomisiones, que ya cuentan con una excelente disposición del personal municipal presente en la convocatoria, de los Bomberos representados por el experimentado Crio. Gabriel Molina, la Policía local, El Consejo de la Ciudad, los medios locales de comunicación, y CEPROFA, entre otros. Respecto a esta institución que con mucho esfuerzo personal procura apoyar a familias en crisis, uno de los temas también preocupantes es el de la violencia familiar, que directa o indirectamente afecta la integridad biopsicosocial de la niñez y adolescencia. Por eso bienvenida será su colaboración con el área de Hogar Protegido de CIPLA.
Una ausencia sentida fue la del Consejo de Educación, la de docentes y también de estudiantes que deberían participar de esta iniciativa. La educación es uno de los pilares de un programa preventivo tanto de lesiones en el hogar como en el tráfico. Ir y volver de la escuela, son dos circunstancias de cierto riesgo, que CIPLA supo encarar con éxito, por medio de los talleres de educación vial.
Finalmente, la presencia del Director del Hospital Municipal y de la responsable de estadísticas del mismo, nos permiten alentar la esperanza de que los esfuerzos preventivos a realizar den sus frutos y ser creíbles, es decir que cuantifiquemos menos lesionados, menos gravedad en las lesiones, una atención precoz y de calidad evaluable, pre e intra hospitalaria y menos dolor por perdidas evitables en nuestra sociedad.

Benjamín Malamud