¿Qué queda del Museo Arqueológico Argentino Ambato?
Un nuevo robo, que según las versiones alcanzaría al noventa por ciento del material que se encontraba depositado en la planta baja de la casona que siempre debió albergarlo, suma a la depredación del patrimonio de la humanidad. Las alarmas fueron desactivadas y la puerta de acceso (de aglomerado) fue prácticamente destruida. Se investiga si el robo se efectuó en una jornada o si se lo llevo a cabo en reiteradas oportunidades. Todo indica que el municipio, “custodio judicial” de las piezas no cumplía, ni cumple, con la vigilancia exigida .
Después del reciente robo son muchos los faldenses que se preguntan sobre qué es lo que queda del Museo Arqueológico Argentino Ambato.
El cuestionamiento necesariamente lleva al inicio del extraño derrotero que sufriera la colección que componía el museo y a tratar de conocer del valor que se le otorgaba.
Que tan valiosa era la colección
No bien fallecido su autor, Aroldo Dionisio Rosso, el 14 de enero de 1992, después de haber pasado sus últimos 42, de sus 72, años, abocado a desenterrar o adquirir piezas de la cultura prehispánica en nuestro país, comenzaba a vislumbrarse la preocupación por el futuro del patrimonio de la humanidad que albergará la colección que había reunido y que se encontraba expuesta desde 1987 en Villa Edén, ciudad de La Falda, en una casona adquirida por el gobierno de la provincia de Córdoba con el único fin de contener las 16 salas en que se había dividido la exposición histórica.
Rosso sostenía que en su colección de arte autóctono se encontraba “la capacidad creadora, el espíritu, la sensibilidad del hombre milenario de la Argentina”. Un hombre que se remontaba a 12.000 – 1.000 a.C. en el período precerámico.
Por aquel entonces, Romualdo Brughetti en un artículo para el diario La Nación decía “hoy existe el peligro de que su notable colección sea dispersada y vendida. Este rico patrimonio arqueológico y artístico honra al país y a la ciudad de La Falda, que la acogió en un digno edificio cedido por el gobierno de Córdoba. Pero no sería extraño, según se dice, que fuera adquirida por algún museo o coleccionista extranjero. Preservarla para los argentinos constituye un deber insoslayable de las autoridades provinciales y nacionales. Pensar lo contrario sería extirpar raíces de nuestra genuina cultura autóctona”.
Por la misma época y en el mismo sentido hacia declaraciones, en la Revista Nueva, el arqueólogo Rex Gonzalez, mantenía que “Mire: quisiera que se publique esto; en las excavaciones de la zona de La Rinconada, en Ambato, Catamarca, obtuvimos un conjunto excepcional de piezas de la cultura Aguada, que es una de nuestras mayores culturas precolombinas. Esta colección esta ahora en el Museo Ambato de La Falda: Es un museo privado, cuyo dueño, que se llama Rosso, acaba de morir, y no sabemos qué va a pasar, pues probablemente los herederos vendan las piezas y la colección se disperse. Entonces sería importantísimo que las autoridades nacionales o provinciales se hagan cargo y que con motivo de los 500 años se haga un hermoso museo”. El comentario de la revista concluía mencionando que las excavaciones de La Rinconada, fueron calificadas por el diario Clarín del 4 de marzo de 1978, como “uno de los hallazgos arqueológicos más trascendentales que recuerda la historia del noroeste argentino...”.
Es obvio que la preocupación por aquel entonces era el qué iban a decidir los herederos de Rosso, sus diferencias los llevaron a no concretar nada.
Desalojo e inició de la depredación
Lamentablemente la decisión política del intendente Luis Emilio Simes que lo desalojo en 1999, llevando la colección a salas desprotegidas del Hotel Edén, para instalar en su lugar una extensión universitaria dedicada al turismo, fue el comienzo del abandono y la depredación . Posteriormente (2002) se descubrió el robo de piezas (estimadas en alrededor de 25), aún no aclarado. Ante ello llegará la inmediata participación de vecinos autoconvocados, bajo la denominación de Amigos del Ambato, que llevó a que, por un Recurso de Amparo presentado ante la Justicia Federal, el municipio de La Falda, en la primera gestión del intendente Marcos Sestopal, se convirtiera en “custodio judicial del patrimonio histórico”, lo que ocurriera en 2004. En ese momento, las ordenes judiciales imponían el resguardo del patrimonio con custodia permanente y alarmas. Las custodias fueron siendo desplazadas por la administración Sestopal, en primera instancia estuvo a cargo de policías que luego fueron reemplazados por integrantes de la brigada de Defensa Civil y finalmente sólo quedaron al amparo de las alarmas. Las que aparentemente habrían sido desactivadas por los ladrones que supuestamente el jueves pasado habrían ingresado en el depósito y se habrían alzado con el noventa por ciento de las piezas ahí emplazadas, de acuerdo con algunas versiones (lo de supuesto corre a cuenta de que algunos investigadores manejarían la hipótesis de que el robo pudo haberse concretado con varios ingresos a lo largo de un determinado lapso).
Qué se sabe del robo
En principio, es poco lo que se sabe. Aparentemente, el jueves, pintores contratados por el municipio se hicieron presentes en la casona de Cuesta del Lago 1469, donde observaron ventanas abiertas y en la planta baja descubrieron daños que les adelantaron la existencia de un ilícito, dirigiéndose en consecuencia a la comisaría donde asentaron la correspondiente denuncia. De acuerdo con los elementos con que se cuenta, los ladrones habrían ingresado al depósito de las piezas embaladas, tras inutilizar las alarmas y “arrancar de cuajo” la puerta que permitía el acceso a ese ámbito. Cabe destacar, que los comentarios manifiestan que “los cerramientos no eran los más adecuado para resguardar piezas de inmensurable valor, la puerta de ingreso al depósito era de aglomerado y la han destrozado con facilidad”.
Se comenta que la policía ve dificultado su accionar por la imposibilidad de acceder a un inventario. Entendemos que la dificultad debería haberse solucionado en cuestión de horas a partir de la decisión de la Fiscal María Alejandra Hillman de iniciar una causa de oficio para investigar el robo, ya que en la oportunidad del primer robo se confeccionó un inventario de las piezas, que se supone debería encontrarse en sede judicial y por el cual se hacía custodio al, por aquel entonces, Secretario de Obras Públicas Jorge Luchetti.
Denuncias
La Asociación Civil Amigos del Museo Ambato de La Falda, radicó una denuncia por el robo al Juzgado Federal Nº 2 con asiento en ciudad de Córdoba, en donde hacen constar la sustracción de piezas que se encontraban bajo custodia del intendente Marcos Sestopal de acuerdo al acta judicial que se labrará a tal efecto, detallan las acciones que se concretaron a partir del conocimiento del hecho, estimando que el robo es de magnitud. Posteriormente señalan que “ la gravedad de lo acontecido y el daño producido al patrimonio del Estado y de la comunidad y a los efectos de realizar todas las medidas conducentes para llegar a los responsables lo más rápido posible y evitar que las piezas salgan del territorio Argentino” solicitan elevar antecedentes al Agente Fiscal de turno a los efectos de que ordene a la Policía Federal su inmediata actuación, poner en conocimiento de la Secretaría de Cultura de la Nación, comunicar actuación y coordinar acciones con la fiscalía de la ciudad de Cosquin, alertar a los puestos fronterizos para evitar la salida de las piezas robadas. Firman la documental José Eloy Spada, María Carlota Leiva, Alejandro Bovo, Luciana Seyral, María Elena Flores, entre otros.
También emitieron un documento público que se publica en forma separada.
Asimismo elevaron nota al Intendente para que “explique su decisión de no implementar custodia policial del Museo Arqueológico Ambato...después del incalificable robo perpetrado...a la colección de piezas arqueológicas que dicho inmueble alberga y de las cuales Ud. es el responsable de custodiar, como consta en el expediente 303-B-04 de Recurso de Amparo solicitado ante el Juzgado Federal Nº2 a cargo del Dr. Alejandro Sánchez Freytes”.
En forma paralela, se espera en las próximas horas la decisión de la Fiscalía Federal de turno que tiene a estudio las actuaciones y ante quien también los vecinos faldenses han presentado denuncia.
Recuadro
Tarde para lamentarse
Sorprende que el intendente Marcos Sestopal haya declarado a La Voz del Interior “que La Falda está de luto por este saqueo”; “le dimos (a la colección) la protección que pudimos con cerraduras, candados y alarmas”. Decimos que sorprende porque el Intendente se arroga un conocimiento del sentimiento que alberga un porcentaje de los faldenses y que de haberlo realmente auscultado y considerado debiese haber sido la causa para que extremara su celo en cumplir con la función de custodio que había asumido ante la Justicia y evitar este lamentable resultado final. Si la seguridad, que se le dio a este invalorable patrimonio de la humanidad y en particular de los argentinos, es el de candados y puertas de aglomerado, pareciese ser que no se le presto la atención necesaria como para salir ahora a mostrar el dolor del luto.
Que supuestamente haya investigadores que sostengan que el robo pudo haber sido concretado en etapas y que las medidas de seguridad eran rudimentarias, hace suponer que prácticamente el lugar no era visitado con la asiduidad que debería hacérselo si tenemos bienes valiosos en custodia y se sabe que es deficiente la seguridad provista. También deja en claro que de nada sirve una alarma si no hay nadie que pueda comunicar a la policía que suena.
Después del robo - siempre después - se puede comprobar la presencia de empleados municipales, durante el día, en guardias rotativas, se desconoce si hay , y a cargo de quién, custodia nocturna.
De nada vale lamentarse hoy cuando la desidia, la inoperancia, la ineptitud, la irresponsabilidad, son factores que han actuado en favor del accionar de los delincuentes. El ahorro de unos pocos pesos, que seguramente se han despilfarrado en algún gasto innecesario, provoca, en la actualidad, un costo político innecesario y hasta posibles demandas indemnizatorias, que, naturalmente, tendrán que enfrentar los faldenses, ya que no será el intendente quien saque de su peculio para hacer frente a esas obligaciones.
Ojalá las piezas se recuperen pronto y sean detenidos quienes las han sustraído, para que no se haga realidad eso de que “después de esto, el museo fue”. Una frase que llena de tristeza y de bronca, porque es el poder político el que ha permitido que pueda llegarse a perder este capital cultural imponderable al que un argentino le diera 42 años de su vida y vino a ofrendárselo a La Falda para valorarla en lo cultural y turístico.
N.H.
Recuadro
Por si ayuda
La cantidad de piezas que componían la colección de Aroldo Rosso era importante y no hay quien se anime a dar precisiones, más aún cuando algunos señalan la posible inexistencia de inventarios. En función de lo cual y sólo para recordar algunas de las piezas más destacadas por los arqueólogos e historiadores que admiraban el trabajo realizado por Rosso, recordaremos que “de la cultura Alamito (350 a.C – 650 d. C.) se celebra un ídolo que presidía una tumba, procedente de Las Rosas (Tucumán), de acentuada expresividad, y de la misma cultura, una máscara antropomorfa destinada a un ritual mágico; otra escultura ceremonial en basalto volcánico, en material lítico, aduce la relación antropoornitomórfica.
La cultura Condorhuasi (0 . 500 n. Era) luce una escultura propiciatoria de mujer en trance de alumbramiento...a la par de Condorhuasi, una escultura de niño sentado, en material lítico, en actitud implorante, de concreción abstracta, procede de Las Estancias (Catamarca). De la cultura Tafi (325 a.C – 1.000 d. C) resalta una figura humana tallada en piedra, de aguda síntesis abstracto-expresionista.
La mayor cantidad de piezas corresponde a La Aguada, extraídas de los yacimientos de Ambato. Emerge la colección de vasos incisos blancos sobre cerámica negra que datan de 650 – 900 años de nuestra era, como el famoso vaso inciso de jaguar rampante y otros dos vasos incisos, uno que representa una mujer, figura propiciatoria de la fecundidad, con los signos de felino a la derecha y de ave (loro) a la izquierda, en tanto que sus piernas están abiertas hacia arriba a la espera del alumbramiento feliz, y en el segundo vaso, una mujer en idéntica posición, con variantes en el dibujo. En ambos casos, las incisiones ofrecen una perfección técnica impecable...La serie de idolillos, de un curioso parecido con la precultura cerámica de Tlatilco (México), o la figurina modelada de una mujer en reposo, que lleva a pensar en las culturas peruanas y centroamericanas; las pipas ceremoniales, las vasijas pintadas, de una de las cuales descuella un cuerpo serpentiforme circundando la pieza; vasija pintada con la presentación de un personaje de relevancia tribal, con pectoral, y los típicos emblemas de la mitología indígena: el ave, el felino, la serpiente...DE la colección de pipas – para uso de alucinógenos – un hornillo bifronte – un rostro joven y otro senil, contrapuestos- revela el segundo una fuerte dramaticidad en el modelado. Un búho en piedra, con ojos engarzados, de La Aguada, de influencia tihuanacuta, se alza al modo de un monolito en lo formal...Un vaso cerámico con una mujer sentada y un tocado con picos de ave en las orejas, un vaso keriforme, con rostros humanos en la parte superior, y grecas y figuras geométricas en la parte inferior, en el ámbito espacial, urnas pintadas y un escudo de bronce, con cuatro cabezas humanas estilizadas, de la cultura Santa María o Santamariana (1.000 – 1.400 n.era) integran el valioso patrimonio del museo. ..escultura de un animal con cabeza y rasgos humanos, en actitud de adoración, de expresión anímica, procedente de EL Mollar (cultura Tafi, Tucumán) ...una figura zoomorfa, presumiblemente una vizcacha, del mismo origen, en donde la expresión radica en la abstracción, ahuecado el lomo y con acanalados interiores no fácilmente descifrables. O la escultura en basalto, de Alamito, densamente expresionista, comparada con la máscara ceremonial lítica de la misma cultura, ya citadas de extremo rigor lineal.
El arte rupestre también esta presente con unas cincuenta transparencias de amplio formato: Cueva de las Manos Pintadas (Santa Cruz) que se remonta a más de 7.000 años a.C, Cerro Colorado (Córdoba), La Tunita (Cerro Ancasti, Catamarca), Cueva del Inca (Jujuy). Petroglifos de Talampaya (La Rioja).
Fte: Diario La Nación – 22 de Marzo de 1992 (Pág. 6 – Secc.7) -
Recuadro
Comunicado
Asociación Civil, Amigos del Museo Ambato de La Falda,
Entidad Cultural sin Fines de Lucro
Nº de Registro I.P.J. en trámite: 007-060679/06
¡ALERTA!
¡ROBO AL MUSEO ARQUEOLOGICO
ARGENTINO AMBATO DE LA FALDA!
Informamos a toda la comunidad que el día jueves 28 de febrero del corriente año en horas de la mañana se constató la violación del depósito donde se encuentran las Piezas Arqueológicas del Museo.
La “Colección Ambato” está bajo protección del Juzgado Federal Nº 2 , a cargo del Dr. Juez Sánchez Freytes y bajo responsabilidad del Ejecutivo Municipal de La Falda; como consta en el expediente de Pedido de Amparo.
Este grupo de ciudadanos que somos, “Vecinos Autoconvocados Amigos del Museo Ambato” en reiteradas oportunidades tuvimos el aval de la Comunidad, hemos representado los intereses de todos.
Peleamos durante 6 años –sin pausa- para resguardar este patrimonio y hoy, en nuestras narices, han avasallado nuestra dignidad y vulnerado nuestros derechos, al robar el patrimonio que permanentemente venimos denunciando en “su falta de protección”.
Ante esta tragedia exhortamos a la comunidad a que participe suministrando cualquier tipo de información o indicio que ayude y permita la recuperación de las piezas de incalculable valor por lo que son un bien preciado para una mafia que reduce y trafica nuestros bienes arqueológicos impunemente.
Solicitamos al mismo tiempo a los medios de prensa locales, nacionales e internacionales que difundan, investiguen y denuncien ante las autoridades Judiciales, Policiales y Políticas que correspondan.
Difunda esta información!!!
correo: ambatolafalda@yahoo.com.ar
Después del reciente robo son muchos los faldenses que se preguntan sobre qué es lo que queda del Museo Arqueológico Argentino Ambato.
El cuestionamiento necesariamente lleva al inicio del extraño derrotero que sufriera la colección que componía el museo y a tratar de conocer del valor que se le otorgaba.
Que tan valiosa era la colección
No bien fallecido su autor, Aroldo Dionisio Rosso, el 14 de enero de 1992, después de haber pasado sus últimos 42, de sus 72, años, abocado a desenterrar o adquirir piezas de la cultura prehispánica en nuestro país, comenzaba a vislumbrarse la preocupación por el futuro del patrimonio de la humanidad que albergará la colección que había reunido y que se encontraba expuesta desde 1987 en Villa Edén, ciudad de La Falda, en una casona adquirida por el gobierno de la provincia de Córdoba con el único fin de contener las 16 salas en que se había dividido la exposición histórica.
Rosso sostenía que en su colección de arte autóctono se encontraba “la capacidad creadora, el espíritu, la sensibilidad del hombre milenario de la Argentina”. Un hombre que se remontaba a 12.000 – 1.000 a.C. en el período precerámico.
Por aquel entonces, Romualdo Brughetti en un artículo para el diario La Nación decía “hoy existe el peligro de que su notable colección sea dispersada y vendida. Este rico patrimonio arqueológico y artístico honra al país y a la ciudad de La Falda, que la acogió en un digno edificio cedido por el gobierno de Córdoba. Pero no sería extraño, según se dice, que fuera adquirida por algún museo o coleccionista extranjero. Preservarla para los argentinos constituye un deber insoslayable de las autoridades provinciales y nacionales. Pensar lo contrario sería extirpar raíces de nuestra genuina cultura autóctona”.
Por la misma época y en el mismo sentido hacia declaraciones, en la Revista Nueva, el arqueólogo Rex Gonzalez, mantenía que “Mire: quisiera que se publique esto; en las excavaciones de la zona de La Rinconada, en Ambato, Catamarca, obtuvimos un conjunto excepcional de piezas de la cultura Aguada, que es una de nuestras mayores culturas precolombinas. Esta colección esta ahora en el Museo Ambato de La Falda: Es un museo privado, cuyo dueño, que se llama Rosso, acaba de morir, y no sabemos qué va a pasar, pues probablemente los herederos vendan las piezas y la colección se disperse. Entonces sería importantísimo que las autoridades nacionales o provinciales se hagan cargo y que con motivo de los 500 años se haga un hermoso museo”. El comentario de la revista concluía mencionando que las excavaciones de La Rinconada, fueron calificadas por el diario Clarín del 4 de marzo de 1978, como “uno de los hallazgos arqueológicos más trascendentales que recuerda la historia del noroeste argentino...”.
Es obvio que la preocupación por aquel entonces era el qué iban a decidir los herederos de Rosso, sus diferencias los llevaron a no concretar nada.
Desalojo e inició de la depredación
Lamentablemente la decisión política del intendente Luis Emilio Simes que lo desalojo en 1999, llevando la colección a salas desprotegidas del Hotel Edén, para instalar en su lugar una extensión universitaria dedicada al turismo, fue el comienzo del abandono y la depredación . Posteriormente (2002) se descubrió el robo de piezas (estimadas en alrededor de 25), aún no aclarado. Ante ello llegará la inmediata participación de vecinos autoconvocados, bajo la denominación de Amigos del Ambato, que llevó a que, por un Recurso de Amparo presentado ante la Justicia Federal, el municipio de La Falda, en la primera gestión del intendente Marcos Sestopal, se convirtiera en “custodio judicial del patrimonio histórico”, lo que ocurriera en 2004. En ese momento, las ordenes judiciales imponían el resguardo del patrimonio con custodia permanente y alarmas. Las custodias fueron siendo desplazadas por la administración Sestopal, en primera instancia estuvo a cargo de policías que luego fueron reemplazados por integrantes de la brigada de Defensa Civil y finalmente sólo quedaron al amparo de las alarmas. Las que aparentemente habrían sido desactivadas por los ladrones que supuestamente el jueves pasado habrían ingresado en el depósito y se habrían alzado con el noventa por ciento de las piezas ahí emplazadas, de acuerdo con algunas versiones (lo de supuesto corre a cuenta de que algunos investigadores manejarían la hipótesis de que el robo pudo haberse concretado con varios ingresos a lo largo de un determinado lapso).
Qué se sabe del robo
En principio, es poco lo que se sabe. Aparentemente, el jueves, pintores contratados por el municipio se hicieron presentes en la casona de Cuesta del Lago 1469, donde observaron ventanas abiertas y en la planta baja descubrieron daños que les adelantaron la existencia de un ilícito, dirigiéndose en consecuencia a la comisaría donde asentaron la correspondiente denuncia. De acuerdo con los elementos con que se cuenta, los ladrones habrían ingresado al depósito de las piezas embaladas, tras inutilizar las alarmas y “arrancar de cuajo” la puerta que permitía el acceso a ese ámbito. Cabe destacar, que los comentarios manifiestan que “los cerramientos no eran los más adecuado para resguardar piezas de inmensurable valor, la puerta de ingreso al depósito era de aglomerado y la han destrozado con facilidad”.
Se comenta que la policía ve dificultado su accionar por la imposibilidad de acceder a un inventario. Entendemos que la dificultad debería haberse solucionado en cuestión de horas a partir de la decisión de la Fiscal María Alejandra Hillman de iniciar una causa de oficio para investigar el robo, ya que en la oportunidad del primer robo se confeccionó un inventario de las piezas, que se supone debería encontrarse en sede judicial y por el cual se hacía custodio al, por aquel entonces, Secretario de Obras Públicas Jorge Luchetti.
Denuncias
La Asociación Civil Amigos del Museo Ambato de La Falda, radicó una denuncia por el robo al Juzgado Federal Nº 2 con asiento en ciudad de Córdoba, en donde hacen constar la sustracción de piezas que se encontraban bajo custodia del intendente Marcos Sestopal de acuerdo al acta judicial que se labrará a tal efecto, detallan las acciones que se concretaron a partir del conocimiento del hecho, estimando que el robo es de magnitud. Posteriormente señalan que “ la gravedad de lo acontecido y el daño producido al patrimonio del Estado y de la comunidad y a los efectos de realizar todas las medidas conducentes para llegar a los responsables lo más rápido posible y evitar que las piezas salgan del territorio Argentino” solicitan elevar antecedentes al Agente Fiscal de turno a los efectos de que ordene a la Policía Federal su inmediata actuación, poner en conocimiento de la Secretaría de Cultura de la Nación, comunicar actuación y coordinar acciones con la fiscalía de la ciudad de Cosquin, alertar a los puestos fronterizos para evitar la salida de las piezas robadas. Firman la documental José Eloy Spada, María Carlota Leiva, Alejandro Bovo, Luciana Seyral, María Elena Flores, entre otros.
También emitieron un documento público que se publica en forma separada.
Asimismo elevaron nota al Intendente para que “explique su decisión de no implementar custodia policial del Museo Arqueológico Ambato...después del incalificable robo perpetrado...a la colección de piezas arqueológicas que dicho inmueble alberga y de las cuales Ud. es el responsable de custodiar, como consta en el expediente 303-B-04 de Recurso de Amparo solicitado ante el Juzgado Federal Nº2 a cargo del Dr. Alejandro Sánchez Freytes”.
En forma paralela, se espera en las próximas horas la decisión de la Fiscalía Federal de turno que tiene a estudio las actuaciones y ante quien también los vecinos faldenses han presentado denuncia.
Recuadro
Tarde para lamentarse
Sorprende que el intendente Marcos Sestopal haya declarado a La Voz del Interior “que La Falda está de luto por este saqueo”; “le dimos (a la colección) la protección que pudimos con cerraduras, candados y alarmas”. Decimos que sorprende porque el Intendente se arroga un conocimiento del sentimiento que alberga un porcentaje de los faldenses y que de haberlo realmente auscultado y considerado debiese haber sido la causa para que extremara su celo en cumplir con la función de custodio que había asumido ante la Justicia y evitar este lamentable resultado final. Si la seguridad, que se le dio a este invalorable patrimonio de la humanidad y en particular de los argentinos, es el de candados y puertas de aglomerado, pareciese ser que no se le presto la atención necesaria como para salir ahora a mostrar el dolor del luto.
Que supuestamente haya investigadores que sostengan que el robo pudo haber sido concretado en etapas y que las medidas de seguridad eran rudimentarias, hace suponer que prácticamente el lugar no era visitado con la asiduidad que debería hacérselo si tenemos bienes valiosos en custodia y se sabe que es deficiente la seguridad provista. También deja en claro que de nada sirve una alarma si no hay nadie que pueda comunicar a la policía que suena.
Después del robo - siempre después - se puede comprobar la presencia de empleados municipales, durante el día, en guardias rotativas, se desconoce si hay , y a cargo de quién, custodia nocturna.
De nada vale lamentarse hoy cuando la desidia, la inoperancia, la ineptitud, la irresponsabilidad, son factores que han actuado en favor del accionar de los delincuentes. El ahorro de unos pocos pesos, que seguramente se han despilfarrado en algún gasto innecesario, provoca, en la actualidad, un costo político innecesario y hasta posibles demandas indemnizatorias, que, naturalmente, tendrán que enfrentar los faldenses, ya que no será el intendente quien saque de su peculio para hacer frente a esas obligaciones.
Ojalá las piezas se recuperen pronto y sean detenidos quienes las han sustraído, para que no se haga realidad eso de que “después de esto, el museo fue”. Una frase que llena de tristeza y de bronca, porque es el poder político el que ha permitido que pueda llegarse a perder este capital cultural imponderable al que un argentino le diera 42 años de su vida y vino a ofrendárselo a La Falda para valorarla en lo cultural y turístico.
N.H.
Recuadro
Por si ayuda
La cantidad de piezas que componían la colección de Aroldo Rosso era importante y no hay quien se anime a dar precisiones, más aún cuando algunos señalan la posible inexistencia de inventarios. En función de lo cual y sólo para recordar algunas de las piezas más destacadas por los arqueólogos e historiadores que admiraban el trabajo realizado por Rosso, recordaremos que “de la cultura Alamito (350 a.C – 650 d. C.) se celebra un ídolo que presidía una tumba, procedente de Las Rosas (Tucumán), de acentuada expresividad, y de la misma cultura, una máscara antropomorfa destinada a un ritual mágico; otra escultura ceremonial en basalto volcánico, en material lítico, aduce la relación antropoornitomórfica.
La cultura Condorhuasi (0 . 500 n. Era) luce una escultura propiciatoria de mujer en trance de alumbramiento...a la par de Condorhuasi, una escultura de niño sentado, en material lítico, en actitud implorante, de concreción abstracta, procede de Las Estancias (Catamarca). De la cultura Tafi (325 a.C – 1.000 d. C) resalta una figura humana tallada en piedra, de aguda síntesis abstracto-expresionista.
La mayor cantidad de piezas corresponde a La Aguada, extraídas de los yacimientos de Ambato. Emerge la colección de vasos incisos blancos sobre cerámica negra que datan de 650 – 900 años de nuestra era, como el famoso vaso inciso de jaguar rampante y otros dos vasos incisos, uno que representa una mujer, figura propiciatoria de la fecundidad, con los signos de felino a la derecha y de ave (loro) a la izquierda, en tanto que sus piernas están abiertas hacia arriba a la espera del alumbramiento feliz, y en el segundo vaso, una mujer en idéntica posición, con variantes en el dibujo. En ambos casos, las incisiones ofrecen una perfección técnica impecable...La serie de idolillos, de un curioso parecido con la precultura cerámica de Tlatilco (México), o la figurina modelada de una mujer en reposo, que lleva a pensar en las culturas peruanas y centroamericanas; las pipas ceremoniales, las vasijas pintadas, de una de las cuales descuella un cuerpo serpentiforme circundando la pieza; vasija pintada con la presentación de un personaje de relevancia tribal, con pectoral, y los típicos emblemas de la mitología indígena: el ave, el felino, la serpiente...DE la colección de pipas – para uso de alucinógenos – un hornillo bifronte – un rostro joven y otro senil, contrapuestos- revela el segundo una fuerte dramaticidad en el modelado. Un búho en piedra, con ojos engarzados, de La Aguada, de influencia tihuanacuta, se alza al modo de un monolito en lo formal...Un vaso cerámico con una mujer sentada y un tocado con picos de ave en las orejas, un vaso keriforme, con rostros humanos en la parte superior, y grecas y figuras geométricas en la parte inferior, en el ámbito espacial, urnas pintadas y un escudo de bronce, con cuatro cabezas humanas estilizadas, de la cultura Santa María o Santamariana (1.000 – 1.400 n.era) integran el valioso patrimonio del museo. ..escultura de un animal con cabeza y rasgos humanos, en actitud de adoración, de expresión anímica, procedente de EL Mollar (cultura Tafi, Tucumán) ...una figura zoomorfa, presumiblemente una vizcacha, del mismo origen, en donde la expresión radica en la abstracción, ahuecado el lomo y con acanalados interiores no fácilmente descifrables. O la escultura en basalto, de Alamito, densamente expresionista, comparada con la máscara ceremonial lítica de la misma cultura, ya citadas de extremo rigor lineal.
El arte rupestre también esta presente con unas cincuenta transparencias de amplio formato: Cueva de las Manos Pintadas (Santa Cruz) que se remonta a más de 7.000 años a.C, Cerro Colorado (Córdoba), La Tunita (Cerro Ancasti, Catamarca), Cueva del Inca (Jujuy). Petroglifos de Talampaya (La Rioja).
Fte: Diario La Nación – 22 de Marzo de 1992 (Pág. 6 – Secc.7) -
Recuadro
Comunicado
Asociación Civil, Amigos del Museo Ambato de La Falda,
Entidad Cultural sin Fines de Lucro
Nº de Registro I.P.J. en trámite: 007-060679/06
¡ALERTA!
¡ROBO AL MUSEO ARQUEOLOGICO
ARGENTINO AMBATO DE LA FALDA!
Informamos a toda la comunidad que el día jueves 28 de febrero del corriente año en horas de la mañana se constató la violación del depósito donde se encuentran las Piezas Arqueológicas del Museo.
La “Colección Ambato” está bajo protección del Juzgado Federal Nº 2 , a cargo del Dr. Juez Sánchez Freytes y bajo responsabilidad del Ejecutivo Municipal de La Falda; como consta en el expediente de Pedido de Amparo.
Este grupo de ciudadanos que somos, “Vecinos Autoconvocados Amigos del Museo Ambato” en reiteradas oportunidades tuvimos el aval de la Comunidad, hemos representado los intereses de todos.
Peleamos durante 6 años –sin pausa- para resguardar este patrimonio y hoy, en nuestras narices, han avasallado nuestra dignidad y vulnerado nuestros derechos, al robar el patrimonio que permanentemente venimos denunciando en “su falta de protección”.
Ante esta tragedia exhortamos a la comunidad a que participe suministrando cualquier tipo de información o indicio que ayude y permita la recuperación de las piezas de incalculable valor por lo que son un bien preciado para una mafia que reduce y trafica nuestros bienes arqueológicos impunemente.
Solicitamos al mismo tiempo a los medios de prensa locales, nacionales e internacionales que difundan, investiguen y denuncien ante las autoridades Judiciales, Policiales y Políticas que correspondan.
Difunda esta información!!!
correo: ambatolafalda@yahoo.com.ar
entrada de Nicolas Heredia | 15:52
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